17Octubre
Chismes de Radio-Pasillo
El chisme es tan antiguo como el arte de hablar. Siempre ha existido y existirá en cualquier ambiente social o laboral. Entre más dañino, más atractivo y más rápido se propaga.
El chisme corporativo o el “radio pasillo”, como coloquialmente se le conoce, puede destruir hasta el más grande de los imperios. Los temas más frecuentes de los rumores son el desempeño laboral, posibles despidos, errores de trabajo, romances e infidelidades.
Los chismes al interior de una empresa pueden tener dos orígenes. El primero es la envidia e inseguridad de algunos empleados, que recurren a él para neutralizar a quienes puedan quitarles protagonismo o brillar más que ellos. El segundo es una política empresarial de puertas cerradas. Es decir, cuando los canales oficiales de comunicación son pobres convierten a la especulación en un medio de información. Es así como el chisme se convierte en el rey del pasillo.
Los rumores enturbian el ambiente laboral, afectan las relaciones interpersonales, crean estrés emocional, bajan la moral de la organización, disminuyen el profesionalismo y por ende bajan la productividad.
Para lograr contrarrestar este nocivo enemigo, es importante construir una cultura empresarial basada en la transparencia, la imparcialidad, el ejemplo de los jefes y la confianza.
De otro lado e igual de importante, trabajar en el fortalecimiento de los valores morales de los empleados, darles reconocimiento, empoderarlos, ayudarlos a construir un proyecto de vida sólido y realizable que los haga más felices y los aleje de la mediocridad de los rumores.
No en vano se dice que un chisme termina cuando llega a los oídos de una persona feliz e inteligente.
Los chismes al interior de una empresa pueden tener dos orígenes. El primero es la envidia e inseguridad de algunos empleados, que recurren a él para neutralizar a quienes puedan quitarles protagonismo o brillar más que ellos. El segundo es una política empresarial de puertas cerradas. Es decir, cuando los canales oficiales de comunicación son pobres convierten a la especulación en un medio de información. Es así como el chisme se convierte en el rey del pasillo.
Los rumores enturbian el ambiente laboral, afectan las relaciones interpersonales, crean estrés emocional, bajan la moral de la organización, disminuyen el profesionalismo y por ende bajan la productividad.
Para lograr contrarrestar este nocivo enemigo, es importante construir una cultura empresarial basada en la transparencia, la imparcialidad, el ejemplo de los jefes y la confianza.
De otro lado e igual de importante, trabajar en el fortalecimiento de los valores morales de los empleados, darles reconocimiento, empoderarlos, ayudarlos a construir un proyecto de vida sólido y realizable que los haga más felices y los aleje de la mediocridad de los rumores.
No en vano se dice que un chisme termina cuando llega a los oídos de una persona feliz e inteligente.